Una crisis es un suceso vital, y/o circunstancial estresante, que aparece de forma inesperada en la vida de una persona.
Es sentida como una amenaza para el bienestar físico y/o psicológico. Atravesarla, puede desembocar en un mejoramiento, o empeoramiento de la situación de la persona.
La intervención en crisis, es la estrategia psicológica, que se aplica en ese momento, para minimizar los factores de riesgo y dolor emocional. Potencia además, los recursos personales de protección, con el objetivo de que la persona se recupere de este estado de trastorno, promoviendo su funcionalidad para afrontar el evento a nivel emocional, racional y conductual.